La práctica del Yoga ofrece las herramientas necesarias para poder emprender un proceso de autoconocimiento y potenciar la capacidad de estar presentes en la propia vida, despertando cualidades positivas que nos permiten desarrollarnos como seres humanos integrales y conscientes de nosotros mismo y de nuestro entorno.
Una clase de Yoga puede proponer una práctica muy potente o suave; muy fortalecedora o reparadora; muy estática o muy dinámica; de mucha precisión técnica o de mucha fluidez. Siempre podrás elegir según tu nivel y tu estado. En todos los casos, la práctica de Yoga se va a adecuar a tus necesidades y te va a otorgar los mejores beneficios para vos.
Una clase de Yoga incluye: Técnicas de Respiración Consciente, Asanas (Posturas), Vinyasa (Secuencia de Asanas), Pranayama (Control Consciente de la Energía Vital), Relajación y Meditación.
Su objetivo es fortalecernos físicamente y mejorar los niveles energéticos para obtener salud y bienestar a todos los niveles, así como obtener todos los beneficios que otorga esta disciplina tales como: Incremento de la fortaleza y la resistencia, mayor flexibilidad, regulación del sistema nervioso y endócrino, mejorar la respiración, Acondicionamiento cardiovascular, mejorar la circulación, Aumentar la energía y vitalidad del cuerpo y de la mente, crear un estado de mayor serenidad, paz y calma mental, gestión de las emociones y los estados de ánimo, favorecer a la visión positiva de las experiencias y los procesos de transformación y por sobre todo las cosas vivir una vida plena y feliz, llena de disfrute, alegría, buenas compañías y un gran desarrollo de la consciencia personal, social y Universal. Siempre respetando el nivel y las necesidades individuales de cada uno de los practicantes.